martes, 1 de febrero de 2011

Mapa del placer masculino


El cuerpo de un hombre está equipado con más de 70 000 metros de nervios que se conectan con cada una de las partes de su cuerpo. Por lo tanto, es un error creer que solo hay una vía para desatar el placer en tu pareja, en realidad existen muchas.
A continuación te presentamos un breve mapa de los múltiples caminos que te conducirán a los puntos en los que tu hombre puede alcanzar el placer absoluto:
Ruta 1: Haz que sufra una deliciosa agonía mientras recorres los bordes de su cuerpo con tus dedos y lengua: procura mantenerlos alejados de su entrepierna.
Coge un cubo de hielo y humedece tu lengua con él para luego lamer con suavidad la parte interna de su muñeca: este es un punto en el recorre mucha sangre y la piel y los nervios son muy sensibles. Continúa a o largo de su brazo, axila, costado, muslo (la parte interna), hasta terminar en sus pies.
Otro juego de intoxicante placer es pasar el cubo por a lo largo de la parte externa de su pierna derecha, y calienta con tu aliento el camino recorrido por el hielo. La sensación frío-caliente lo enloquecerá. Continúa el recorrido hasta llegar a su ombligo, en el cual harás círculos con tu lengua.
Ruta 2: Sigue explotando el poder sensitivo de tu lengua y labios, esta vez en la parte posterior de su cuerpo. Ubícate detrás de él, y dale un beso en la nuca, sigue bajando con tu lengua hasta su cuello y dale unas pequeñas mordidas. Alterna los mordiscos con dulces besitos y vas a ver cómo se estremece.
Ahora ve más al sur, recorre su torso hasta llegar a su pene, y succiona con toda la pasión que puedas. También mordisquea y aprieta con suavidad: a los hombres les gusta una presión firme (pero no dolorosa) en sus genitales. Cuando veas que está súper caliente, móntate sobre él de espaldas, esa indiferencia lo hará sentir “como un objeto sexual”, lo cual resultará excitante para ambos.
Mañana, te traemos más rutas del mapa del placer.

No hay comentarios:

Publicar un comentario