El alcohol más placer, puede ser una combinación fatal
En relacion al tema del alcohol y las relaciones sexuales. El principal malentendido con respecto a este estimulante es que cuando se toma en exceso, disipa los frenos inhibitorios y es entonces cuando una persona bajo estos efectos comienza a actuar de una forma mucho más atrevida que cuando se encuentra sobrio. Se trata simplemente de una falsa sensación de coraje y valentía. Nunca de una estimulación de los sistemas de atracción sexual.
Los efectos fisiológicos del alcohol sobre la sexualidad son por el contrario muy negativos.
En los varones tiene un efecto adverso sobre la erección, ya que aún en dosis muy bajas inhibe el óptimo funcionamiento del sistema nervioso autónomo. En bebedores frecuentes esto puede llevar a una disfunción seria y pérdida de la autoestima, únicamente solucionables por la consulta a un médico o psicólogo especializado.
En la mujer produce una inmediata pérdida de sensibilidad, que puede reducir sensiblemente las posibilidades de alcanzar un orgasmo. Además los efectos en las mujeres se pueden potenciar debido a su menor masa corporal, mayor grasa corporal cercanía del periodo menstrual y otras diferencias anatómicas con el varón.
Comenzar una conquista amorosa con una copa en la mano puede ser muy cinematográfico, pero si estas conductas adictivas se repitan las consecuencias pueden ser muy destructivas tanto para hombres como para mujeres.
Al contrario, luego de una encuesta realizada con una muestra de 20 mujeres, 8 de ellas esperan estar bajo efectos del alcohol para poder percibir o experimentar un verdadero orgasmo, la sensación de desequilibrio emocional, mareo u orgasmo les resulta bastante exitante, al momento de tener relaciones sexuales.
La mujer, en este sentido es más vulnerable que el hombre a la hora de controlar sus deseos sexuales bajo efectos del alcohol...
Escrito por: Olga Gómez
Escrito por: Olga Gómez
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